Augusto Pinochet no está muerto: es un vampiro anciano que, tras 250 años en este mundo, ha decidido morir de una vez por todas debido a las dolencias que le acarrean su deshonra y los conflictos familiares.
Sinopsis:
Augusto Pinochet no está muerto: es un vampiro anciano que, tras 250 años en este mundo, ha decidido morir de una vez por todas debido a las dolencias que le acarrean su deshonra y los conflictos familiares.
Una sombra siniestra todavía se cierne sobre Chile hoy, incluso después del retorno a la democracia. Es la sombra del dictador Augusto Pinochet, que tomó el poder mediante un golpe de estado el 11 de septiembre de 1973, que ensangrentó su país y al que sometió mediante la tortura y el horror.
Pablo Larrín, cuyo padre fue colaborador de la dictadura, retrata a Pinochet como un vampiro centenario que sigue chupando sangre chilena, y tratando de... (seguir leyendo)
Miguel Arkangel
Una sombra siniestra todavía se cierne sobre Chile hoy, incluso después del retorno a la democracia. Es la sombra del dictador Augusto Pinochet, que tomó el poder mediante un golpe de estado el 11 de septiembre de 1973, que ensangrentó su país y al que sometió mediante la tortura y el horror.
Pablo Larrín, cuyo padre fue colaborador de la dictadura, retrata a Pinochet como un vampiro centenario que sigue chupando sangre chilena, y tratando de... (seguir leyendo)