Película independiente de bajo presupuesto, de temática sobrenatural, reencarnaciones, sectas, etc.
Trata sobre una pintora frustrada que hereda una casa antigua y la ve como una oportunidad y un nuevo comienzo para su trabajo y su vida. La casa tiene su esperable pasado y sus secretos aterradores.
Éste filme tiene un guión que toma prestado de muchas películas del género de fantasmas y lo combina de forma aleatoria con escenas paranormales mil veces vistas.
Se nota el toque femenino de la directora Bidisha Chowdhury en su poco ruda definición de la historia en el tema del ocultismo. La trama además tiene pocos sustos y las escenas sangrientas son pésimas.
La protagonista está correcta en su papel, pero se luce Marvin, un joven con discapacidad del desarrollo. Quien embarra la cancha es el casual y oportunista vecino y galán, relacionado con el previsible y torpe giro en la historia.
Destaca sólo la cinematografía como en las escenas nocturnas y la
escenografía, como la del atmosférico ático polvoriento, pero eso no ayuda a un guión pobre con actuaciones normales.
Es un popurrí de elementos recurrentes en el género, como fotos antiguas en un baúl en el ático, cajas musicales, mensajes tenebrosos, pentagramas escritos en paredes, etc.
«Adaline» es un filme rutinario, que va de mayor a menor y que finalmente no requiere mucho análisis, quedando a pocos pasos de lo mediocre.
Gerpro
3
Película independiente de bajo presupuesto, de temática sobrenatural, reencarnaciones, sectas, etc.
Trata sobre una pintora frustrada que hereda una casa antigua y la ve como una oportunidad y un nuevo comienzo para su trabajo y su vida. La casa tiene su esperable pasado y sus secretos aterradores.
Éste filme tiene un guión que toma prestado de muchas películas del género de fantasmas y lo combina de forma aleatoria con escenas paranormales mil veces vistas.
Se nota el toque femenino de la directora Bidisha Chowdhury en su poco ruda definición de la historia en el tema del ocultismo. La trama además tiene pocos sustos y las escenas sangrientas son pésimas.
La protagonista está correcta en su papel, pero se luce Marvin, un joven con discapacidad del desarrollo. Quien embarra la cancha es el casual y oportunista vecino y galán, relacionado con el previsible y torpe giro en la historia.
Destaca sólo la cinematografía como en las escenas nocturnas y la
escenografía, como la del atmosférico ático polvoriento, pero eso no ayuda a un guión pobre con actuaciones normales.
Es un popurrí de elementos recurrentes en el género, como fotos antiguas en un baúl en el ático, cajas musicales, mensajes tenebrosos, pentagramas escritos en paredes, etc.
«Adaline» es un filme rutinario, que va de mayor a menor y que finalmente no requiere mucho análisis, quedando a pocos pasos de lo mediocre.
3 1⁄2.-
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