8

Esta película de animación nominada al Óscar en la pasada edición de los premios de la Academia Americana esconde mucho más de lo que aparenta en un principio.

Durante sus escasos ochenta minutos, Ale Abreu nos ofrece una maravillosa fábula ecologista, una reflexión sobre la soledad y el envejecimiento, así como una defensa férrea de la familia como refugio ante las adversidades de la vida.

Todos, incluso en nuestros últimos momentos, siempre recordaremos esa caricia materna, ese cariño paterno que es lo que nos ha llevado a ser lo que somos. Cuando llegue el momento de nuestro último adiós, allí estará se amor imperecedero esperándonos. Y ese mensaje queda plasmado en esta película de forma magistral.

En algún momento la cinta peca de reiterativa y el ritmo algo lastrado por ello, pero la enorme inventiva visual, la preciosa banda sonora y el estupendo mensaje que transmite compensan con creces estos defectos.

Pocas veces se encuentra una película que con tan poco, consiga transmitir tanto.

Mi nota: ****

Me gusta (0) Reportar