En primer lugar, este “doc“, como se le llama con tanto cariño a lo largo del programa, no lo es en absoluto. Al estilo del Proyecto Blair Witch, se toma lo que puede percibirse como una leyenda convincente y se “escribe“ una historia imaginaria para darle más vida. Si bien no todos los aspectos del programa son menos que admirables, sí toca la vida oculta de un director innovador. En su mayor parte, parece un truco publicitario por parte del famoso cineasta. No me malinterpretes, me encantan sus películas.
Pero esto parece ser un intento de aumentar sus cifras de taquilla, dado que sus dos últimas de sus tres películas fracasaron en comparación con El sexto sentido.
Aún así, hay algunos aspectos muy interesantes del programa y lo convierte en un espectáculo muy entretenido; si puedes superar las escenas a veces miserablemente interpretadas. Lo que más me molestó fue Nathaniel Kahn, el director de la película. Su interpretación como un documentalista motivado es endeble en todo momento, y sus entrevistas apenas son aceptables como lo que se supone que son verdaderos encuentros.
Sin embargo, como dije, es un reloj muy interesante, a pesar de que dura tres horas con una gran cantidad de comerciales. Pero bueno, ¿qué se supone que debemos hacer con las cadenas de televisión, verdad?
Apcho_28
5
En primer lugar, este “doc“, como se le llama con tanto cariño a lo largo del programa, no lo es en absoluto. Al estilo del Proyecto Blair Witch, se toma lo que puede percibirse como una leyenda convincente y se “escribe“ una historia imaginaria para darle más vida. Si bien no todos los aspectos del programa son menos que admirables, sí toca la vida oculta de un director innovador. En su mayor parte, parece un truco publicitario por parte del famoso cineasta. No me malinterpretes, me encantan sus películas.
Pero esto parece ser un intento de aumentar sus cifras de taquilla, dado que sus dos últimas de sus tres películas fracasaron en comparación con El sexto sentido.
Aún así, hay algunos aspectos muy interesantes del programa y lo convierte en un espectáculo muy entretenido; si puedes superar las escenas a veces miserablemente interpretadas. Lo que más me molestó fue Nathaniel Kahn, el director de la película. Su interpretación como un documentalista motivado es endeble en todo momento, y sus entrevistas apenas son aceptables como lo que se supone que son verdaderos encuentros.
Sin embargo, como dije, es un reloj muy interesante, a pesar de que dura tres horas con una gran cantidad de comerciales. Pero bueno, ¿qué se supone que debemos hacer con las cadenas de televisión, verdad?
Me gusta (0) Reportar